Skip to main content

You are here

Afrotopía

Casa África alberga en su sede esta exposición colectiva en colaboración con ACERCA, un programa de capacitación para el desarrollo en el sector cultural de la Cooperación Española, creado en el año 2005 para implementar la primera línea de la Estrategia de Cultura y Desarrollo: la formación de capital humano en el ámbito de la Cultura.

La muestra consiste en una selección de los trabajos realizados por 35 jóvenes fotógrafos africanos durante tres talleres Acerca consecutivos, diseñados e impartidos por Héctor Mediavilla en: Dakar (Senegal), Niamey (Níger) y Bamako (Mali) en noviembre de 2017.

La inauguración de la muestra tendrá lugar el jueves 17 de octubre de 2019 a las 19:00h.

Afrotopía fue el título elegido por la organización de la 11ª edición de los Rencontres de Bamako, la bienal africana de fotografía con más tradición y prestigio. La finalidad era brindar a los artistas africanos la oportunidad de reflexionar sobre su futuro y la contribución de su continente a un mundo globalizado. Así, todas las exposiciones del festival se enmarcaron en dicha reflexión, incluida ésta, que se inauguró en el Conservatorio de Artes y Oficios Multimedia (CAMM) de Bamako, como parte de la sección Off del festival.

¿Qué es Afrotopía? ¿Cuál es la utopía africana? Felwine Sarr, escritor, economista y músico senegalés, acuñó el término Afrotopia en 2016. En su libro, publicado dentro de la Colección de Ensayos de Casa África, propone una nueva manera de mirar al continente africano, abogando por esa descolonización mental que piden muchos autores del continente. Sarr mira hacia el futuro y se pregunta sobre cuestiones como el modelo que debe seguir África en su desarrollo. Su respuesta invita a la reflexión, pues África tiene que dejar de mirarse en el espejo de occidente. Sarr propone una utopía activa, en la que el continente desarrolla su propio proyecto, con una visión propia de su futuro que dé lugar a la acción adecuada, repensando el paradigma actual y alejándose de los parámetros impuestos desde el exterior. 

A lo largo de los tres talleres de reflexión y creación fotográfica liderados por Mediavilla, cada alumno eligió libremente un proyecto fotográfico que pudiese desarrollar en un máximo de tres semanas. En cada país, se discutieron y valoraron colectivamente las distintas ideas que nacían de los fotógrafos para que se ajustasen al tema central del festival: Afrotopía.

En Dakar, participaron dos fotógrafas y siete fotógrafos en el taller. Jóvenes, entre 22 y 35 años, con perfiles, experiencias e inquietudes diversas. La excepción fue Assane Sow, de 45 años, foto reportero con más de veinte años de carrera en los principales diarios senegaleses, quien deseaba desarrollar un trabajo más personal, más "artístico", mostrando una gran motivación para transformar su mirada periodística (la que esperan y valoran sus jefes) en una voz propia, que naciera de sus inquietudes personales y de su visión del mundo en el que vive.

En Niamey, Apsatou Bagaya, gran fotógrafa nigerina, fue la encargada de realizar la selección de los participantes en el taller. En Níger, a diferencia de Senegal, no hay escuelas de fotografía ni de cine, tampoco de comunicación visual, por lo que es mucho más difícil aprender a desarrollar este tipo de profesiones. De los catorce seleccionados, tres eran mujeres. Todo un éxito en un país en el que las fotógrafas apenas existen y donde Apsatou es una maravillosa excepción que se está convirtiendo en fuente de inspiración para chicas más jóvenes. El cuarto día de taller cada alumno confirmó el proyecto personal en el que quería trabajar. Resultó ilustrador que los temas elegidos se decantasen por ensalzar tradiciones sin negar la globalización.

El grupo de alumnos de Bamako tenía otro perfil. Eran muy jóvenes, menores de 25 años, estudiantes del segundo curso de multimedia en el Conservatorio de Artes y Oficios Multimedia (CAMM). La fotografía no era su prioridad, la mayoría se decantaba por contenidos multimedia, grafismo o vídeo. Pero tuvieron una oportunidad de ampliar sus conocimientos en el ámbito fotográfico y la aprovecharon con ese entusiasmo de la primera juventud, las ganas de experimentar y de arriesgar sin tener miedo a la crítica o al fracaso. Aunque muchos de ellos fueran inexpertos, sabían de qué querían hablar, cuál era el mensaje que querían transmitir.

    

«Fueron algo más de tres semanas intensas e ilusionantes, llenas de intercambios enriquecedores para todos los que participamos,
cuyo colofón fue la exposición colectiva en el marco del festival, que tuvo una acogida muy positiva.

Me siento orgulloso y feliz por poder aportar mi granito de arena al desarrollo de la fotografía africana contemporánea.
En otro plano, he regresado de este continente cargado de vitalidad, lleno de nuevas experiencias y aprendizajes, con nuevos amigos.
Una vez más, África me ha atrapado hasta mi próximo regreso.
Entre tanto, deseo que la visión de Sarr se vaya materializando y que el resto del mundo reconozca que África tiene mucho por decir»

Héctor Mediavilla

Eventos y actividades