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La economía de Guinea Ecuatorial continúa siendo dominada por los hidrocarburos y todavía sufre las consecuencias de la recesión económica causada por la caída de los precios del petróleo en 2014, aunque la contribución de actividades no petroleras va en aumento. En general, el panorama económico sigue siendo negativo y se esperaba una recesión en 2020 junto a una disminución de la actividad del sector petrolero, cuya situación se verá empeorada con el panorama mundial de crisis sanitaria actual.
Para 2019 se estimó una reducción del PIB del 4.1% debido a una menor actividad del sector petrolero en los años anteriores. La inflación es baja y se sitúa en torno al 1.4% para 2019, y los recortes en el gasto de capital público han hecho mejorar la recaudación de los ingresos fiscales, con un aumento de los ingresos no petroleros que abarcan un 7.2%. Esta mejora de las finanzas también se debe a la implementación de medidas del programa de evaluación comparativa por parte del FMI y el gobierno, cuyo principal objetivo es mantener la estabilidad macroeconómica y fortalecer el sector bancario, a la vez que se promueve el bienestar social y la diversificación económica. El saldo presupuestario se volvió superavitario en 2018 con un 0.5% del PIB, y creció en 2019 al 1.3%. El déficit en cuenta corriente también mejoró, bajando al 5.6% del PIB en 2019 gracias a una mejora en la balanza comercial derivada de una reducción de las importaciones en bienes de capital.
El sector exterior es fundamental para la actividad económica del país, y los hidrocarburos suponen casi la totalidad de sus exportaciones. En cambio, sus importaciones gozan de una amplia variedad, ya que importan prácticamente todos sus bienes de consumo, destacando los sectores de alimentación y bebidas, bienes de equipo, vehículos y elementos de construcción y maquinaria. En 2017, España fue el principal proveedor de mercancías del país con una gran diversidad de productos, seguida de China y Estados Unidos. En cuanto a las exportaciones, China ocupa el primer lugar, seguida de India y Corea del Sur. En general, Guinea Ecuatorial es un país que ofrece grandes oportunidades comerciales para las empresas españolas, pues sus productos tienen ya bastante presencia en el país y sus ciudadanos están muy familiarizados con los productos de marca España. Entre los principales sectores de oportunidad destacan los bienes de consumo, el mantenimiento de edificios, los servicios de ingeniería y arquitectura y los servicios de formación.
A pesar de los datos, en los últimos años la pequeña ganancia experimentada en el petróleo ha permitido al país modernizar su infraestructura en las últimas dos décadas y se están implementando programas que abarcan una amplia variedad de infraestructuras nuevas y en buenas condiciones (carreteras, puertos, aeropuertos, suministro de agua y electricidad). La diversificación económica sigue siendo un objetivo primordial para el crecimiento y la estabilidad económica a largo plazo. Dadas las características geográficas del país, el sector agrícola y en especial la pesca y la acuicultura tienen un gran potencial para el país y podrían ser una fuente importante de diversificación, pero su contribución a la economía nacional aún es muy baja. A nivel institucional, la debilidad estructural obstaculiza su capacidad para administrar las finanzas públicas y la transformación económica y social.
Fuentes: ICEX y African Economic Outlook
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